¿ES LA NEUROEDUCACIÓN UNA SOLUCIÓN PARA EL FRACASO ESCOLAR Y PARA EL ASOCIADO AL TDAH EN PARTICULAR?
FRACASO ESCOLAR Y TDAH EN DATOS:
Para hacernos una idea de cuál es la situación en España del fracaso escolar entre el alumnado con tdah, vamos a mostrar datos de distintos estudios realizados sobre la cuestión:
Uno de cada 3 jóvenes dejó los estudios antes de terminar secundaria, frente a la media europea que es de uno de cada 5 (UNESCO).
Uno de cada 4 casos de fracaso escolar puede tener como origen el tdah no diagnosticado (Quintero 2012).

Un 22% de los adolescentes con tdah accede a la universidad. Un 5% de tdah se gradúa (Study academica Fischer 2003).
España es el país con mayor tasa de abandono escolar de U.E., según los datos publicados por la Oficina Comunitaria de Estadística EUROSTAT.
El 17,3% de los jóvenes españoles entre 18 y 24 años no siguen formándose tras finalizar secundaria en 2019.
Como podemos observar, todos los datos nos hablan de abandono cuando el alumno está en secundaria, pero si queremos resolver y analizar el problema ¿no deberíamos poner el foco en primaria?
En primaria es fundamental que en los centros existan equipos de orientación con recursos para diagnosticar al alumnado que pueda tener necesidades educativas especiales.
En la actualidad esto no es así. No hay suficientes recursos y si no hay suficientes recursos no se produce intervención o la que se produce no es la adecuada.
Estamos ante un modelo de educación que no se adapta a la forma de aprender de los alumn@s.
El fracaso escolar, aún sin tener en cuenta a los alumnos con necesidades educativas especiales, sigue siendo muy alto.
Los profesores necesitan formación para adaptar su metodología de enseñanza a los alumnos del 2020.

¿QUÉ ES LA NEUROEDUCACIÓN? ¿PUEDE LA NEUROEDUCACIÓN AYUDARNOS A MEJORAR ESTOS DATOS?
En los últimos años son muchos los descubrimientos que ha hecho la Ciencia, en particular la neurociencia, en cuanto al funcionamiento del cerebro.
La neuroeducación utiliza todos esos nuevos conocimientos en los campos de la motivación, la inteligencia, la atención, la memoria y otros procesos psicológicos para aplicarlos en la educación.
El fin es optimizar el proceso enseñanza-aprendizaje.
De esta manera nos encontramos frente a una propuesta diferente de enseñar y aprender. Aparecen fórmulas que rompen con los esquemas tradicionales de la educación.
La neuroeducación no es una metodología exclusivamente indicada para los alumnos con dificultades de aprendizaje como el Tdah.
Es una forma distinta de entender el proceso de enseñanza-aprendizaje, una respuesta a las necesidades educativas del alumnado mucho más inclusiva y respetuosa con su desarrollo.
Los conocimientos de cómo funciona el cerebro habrán de aplicarse a todo el ciclo educativo, así como al ámbito universitario y a las escuelas de adultos.

La escuela tradicional se sustenta en aprendizajes memorísticos, ejercicios repetitivos y descontextualizados, donde el alumno es el sujeto pasivo y el profesor es la parte activa del proceso enseñanza-aprendizaje.
¿CÓMO CAMBIAMOS ESTE PANORAMA?
Compartiendo protagonismo. El alumnado debe adquirir mayor peso en el proceso de enseñanza aprendizaje. Los alum@s pasan a ser protagonistas activos de su aprendizaje.
Buscando la motivación intrínseca del alumno. La participación del alumnado viéndose parte activa en su aprendizaje se encargará de conseguir esta motivación.
Utilizando una metodología muy práctica y experimental. “Se aprende haciendo”.
El juego es la vía para conseguir este aprendizaje. Las dinámicas que implican movimiento también son buenas aliadas.
El juego imprescindible para el aprendizaje
Las emociones estarán presentes en todo el proceso. Son cruciales para conseguir que el alumn@ consiga sus propósitos.
¿CÓMO PUEDEN AYUDAR TODOS ESTOS DESCUBRIMIENTOS AL TDAH?
Los niñ@s con tdah regulan mal sus emociones. Tienen frustraciones continuas, son muy impulsivos, tienen dificultad en el reconocimiento de las emociones ajenas.
Todo esto sucede porque no existe una buena coordinación entre el sistema límbico (cerebro emocional) y la corteza cerebral (cerebro pensante).

La amígdala y el hipocampo son dos de las estructuras del sistema límbico que mayor implicación tienen con el aprendizaje.
Los neurotransmisores que más relación tienen con el trastorno por déficit de atención con hiperactividad son la dopamina y la noradrenalina. La liberación de estos neurotransmisores en el cerebro del niñ@ con tdah se da por debajo de lo normal.
Cuando se estresa o se activa en exceso la amígdala, se produce un déficit de dopamina en el cerebro y por tanto no hay aprendizaje.
Para conseguir el aprendizaje la clave será activar la amígdala, pero no en exceso, de esta forma se liberará la dopamina necesaria para poder pensar y retener información.
Cerebros hiperactivos en el aula.
¿CÓMO CONSEGUIMOS ESTA LIBERACIÓN DE DOPAMINA?
Es esencial que los niñ@s disfruten de un buen clima familiar, social y escolar.
Un clima de tranquilidad y confianza ayudará al pequñ@ enormemente. Si sintiera miedo o angustia, la activación de la amígdala se dispararía por encima de lo deseable y la dopamina disminuiría.
Se sabe también que la activación de la amígdala es muy superior cuando un niño le está explicando un concepto o habilidad a otro niño, que cuando lo explica el profesor.
Esto hace que el aprendizaje sea mayor.
Existen una serie de técnicas para activar la dopamina en el alumnado:
Actividad motriz.
Provocar el bostezo.
Reírse.
Algún dulce.
Jugar.
DESPERTAR LA CURIOSIDAD ES FUNDAMENTAL.
Como hemos visto la emoción es crucial para el aprendizaje. Una de las emociones más importantes es la CURIOSIDAD.
Despertar la curiosidad en un niñ@ con tdah suele ser bastante complicado, pero imprescindible para conseguir aprendizaje.
Reiteramos la necesidad de que se active la amígdala para la liberación de dopamina, y otra forma de hacerlo es provocando CURIOSIDAD.
Según Francisco Mora, existen una serie de estrategias para despertar la curiosidad del alumnado:
Iniciar la clase con algo provocador, algo diferente y que llame la atención del alumno. Puede ser una idea, una manera de vestir, un dibujo.
Crear un clima de confianza en la clase para que el alumnado se sienta parte de ella. Es fundamental que los niñ@s se sientan respetados y no tengan ningún miedo a participar y dar sus opiniones.
Favorecer el pensamiento crítico y la atención del alumnado. A lo largo de la clase se puede plantear alguna duda o incongruencia.
Invitar al alumn@ a que investigue de forma personal alguna cuestión. Se puede mandar para casa alguna tarea o vídeo que invite a la reflexión.
Reconocimiento público de los logros de la clase o de una persona en concreto.
¿QUÉ METODOLOGÍAS PODEMOS UTILIZAR EN CLASE PARA IMPLEMENTAR TODAS ESTAS CUESTIONES?
En los últimos años todo ha evolucionado a pasos agigantados, sobre todo en lo que se refiere a cuestiones tecnológicas.
En educación parece que esta evolución se hace de rogar, pero es necesario que el modelo enseñanza-aprendizaje avance a mayor velocidad de la que lo hace.
Una de las claves a la hora de implementar estas metodologías, es el cambio de mentalidad del profesorado.
Los docentes deberán distinguir entre las necesidades del que aprende de los deseos del que enseña.
En el ámbito familiar ocurre exactamente lo mismo. Hemos de dejar al niño que sea creativo proponerle retos atractivos. No es cuestión de decirles lo que tienen que hacer.
A continuación expondremos una serie de metodologías para aplicar en el aula. Algunas son muy innovadoras y otras ya han demostrado su eficacia a lo largo de las últimas décadas en algunos sistemas educativos.
El aprendizaje cooperativo. Metodología basada en la utilización de estrategias para que el alumnado se involucre en las tareas y ayuden a sus compañeros a aprender.
El aprendizaje cooperativo no es trabajo en grupo.
Con este tipo de aprendizaje conseguimos:
Potenciar las relaciones positivas entre el alumnado. Se produce una interacción simultánea de todos los miembros del grupo, una igual participación y una responsabilidad individual de cada alumno.
Es flexible y se puede adaptar al alumno. Es una metodología que nos permite adaptarnos a la diversidad de los alumnos
Enseña a aprender. Favorece un aprendizaje significativo por parte de los alumnos.
Mejora las relaciones dentro del aula. Se fomenta la tolerancia, la integración y cohesión grupal, la autoestima y el autoconcepto de los alumnos.
Fomenta el pensamiento y la comunicación
Logra alumnos más motivados
Aprendizaje cooperativo y neuroeducación: guiando la poda sináptica
El aprendizaje invertido (Flipped learning). El avance tecnológico que hemos experimentado en los últimos años nos hace replantear la posición del maestro como elemento activo del proceso enseñanza-aprendizaje y el alumno como elemento pasivo.
Las clases tradicionales o clases magistrales no suelen ser adecuadas para captar la atención de los alumn@s. Son clases donde el docente tiene toda la información y explica a sus alumnos todo el conocimiento.
En ocasiones esta metodología funciona, pero solo si el docente es:
Un gran comunicador.
Un gran motivador .
Un especialista en la materia.
El aprendizaje invertido dará mayor protagonismo al alumnado. Las clases serán el lugar donde se trabaja en grupo y el profesor/-a se dedica a resolver las dudas de sus alumn@s de forma individual.
Será fuera de clase donde los alumn@s deberán ahondar e investigar en sus conocimientos.
La plataforma Khan Academy, es un ejemplo muy interesante de este tipo de aprendizaje. Khan Academy | Práctica, lecciones y cursos en línea gratuitos.
Los alumnos tienen acceso a vídeos, explicaciones, ejercicios de las distintas asignaturas.
Se comparte el aprendizaje y las dudas con el resto de participantes y tutores.
Aprendizaje por proyectos. Esta metodología pretende que l@s estudiantes, planeen, implementen y evalúen proyectos que tienen aplicación en el mundo real, más allá del aula.
Son muchas las ventajas para el alumnado con tdah, pues aumenta la motivación y la autoestima.
Se introducen prácticas que fomentan la participación partiendo de sus experiencias, respetando los intereses y la conexión con la realidad.
El alumnado consigue crear un vínculo afectivo con ese proceso, ya que es el protagonista de su aprendizaje.
Aprendizaje basado en proyectos desde la neuroeducación
CONCLUSIONES.
Desde la neuroeducación se asume con naturalidad la importancia del movimiento, el juego, las emociones.

Perspectiva desde la que se favorecerá el desarrollo de las funciones cognitivas complejas, necesarias para un buen desarrollo académico, pero también y sobre todo el crecimiento personal del alumnado.
Todos los niñ@s y en especial los que tienen tdah, necesitan que sus profesor@s y familia les generen mentalidad de crecimiento.
Mentalidad de crecimiento: la mejora siempre es posible
La neuroeducación nos está ofreciendo una alternativa ¿Por qué no probarla? No parece descabellado dar una oportunidad a un modelo educativo que:
Se basa en estudios científicos relativos al funcionamiento del cerebro.
Respeta al niñ@ y su evolución madurativa.
Pone por encima los intereses del alumnado a los del educador/-a y su comodidad.
Considera el proceso más importante que el resultado.
Prepara al alumno para un futuro cambiante, donde los empleos y las competencias requeridas son diferentes a las que conocíamos hasta ahora.
Puede ser bueno tanto para niñ@s con necesidades educativas especiales o sin ellas.
El futuro pasa por la Neuroeducación
¡¡¡ANIMÉMONOS. CAMBIEMOS LA EDUCACIÓN!!!
NIEVES NAVARRO MOLINA